En Pleno del Parlamento Europeo celebrado el miércoles 13 de diciembre ha apoyado por amplia mayoría el informe “Una visión a largo plazo para las zonas rurales de la UE” en el que se reconoce el papel esencial de las cooperativas agroalimentarias en la sostenibilidad económica, social y medioambiental de las zonas rurales.
Este documento expone los retos a los que se enfrentan las áreas rurales y propone actuaciones y medidas para luchar contra la despoblación, la falta de servicios y la mejora de la sostenibilidad económica, social y medioambiental. Entre las medidas propuestas por el Parlamento Europeo, se insta a la Comusión Europea a promover las cooperativas agroalimentarias en las zonas rurales porque aportan valor añadido a sus productores, crean empleo y diversifican la economía, y pide a la Comisión y a los Estados Miembros que generen medidas para su fomento y desarrollo.
Las zonas rurales de la UE son fundamentales para salvaguardar el modelo de vida europeo, según datos de la Comisión Europea, en ellas viven unos 137 millones de personas, el 30,6% de la población y el 83% de la superficie total de la UE. Debido a su importancia, la Comisión Europea publicó en junio de 2021 la Comunicación sobre “Una visión a largo plazo para las zonas rurales de la UE” para hacerlas más fuertes, conectadas, resilientes y prosperas antes del 2040. Esta Comunicación establece una hoja de ruta con actuaciones concretas para hacer frente a los problemas que estas zonas afrontan, como es la brecha socioeconómica con las zonas urbanas.
En España hay 3.669 cooperativas agroalimentarias con más de 1 millón de socias y socios, que en 2021 facturaron 34.000 millones de euros, lo que representa más del 50% de la producción final agraria española. Las cooperativas permiten a sus agricultores y ganaderos ser más eficientes y ser actores principales de la cadena alimentaria, además, no se deslocalizan y la riqueza que generan se reinvierte en el territorio.